¿Qué le pedimos a un Docente?

Las confusiones acerca del trabajo propio de los Docentes hacen estragos en el sistema educativo.

Un Docente no es un organizador de entretenimientos, ni una madre ni un padre, ni una mucama o mucamo con título, ni un psicólogo, ni un policía, ni un amigo, ni un operador religioso ni político, ni un iluso destinado a vivir con dos pesos.
Un Docente es un profesional. Su profesión es educar. Su trabajo se evalúa a través de la evolución afectiva, intelectual, física y artística de sus alumnos.
Es eso lo que nos asusta a veces. Un buen Docente nos hace conscientes de nuestra falta de educación.
Es más fácil pedirle que sea simpático y se ocupe de otra cosa.

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